04 junio 2005

CristaleS NegroS (1994 -1995)

A continuación les presentaré la Obra que da nombre a este Blogg... son trabajos realizados entre los años mencionados; fueron mis primeras incursiones en el mundo de las letras y especificamente en el mundo de la poesí­a. Lugar fisico en el me encontraba, mi tierra natal... La Unión, X Región, Chile.

Paisajes inquietantes, naturaleza subyugante... verdes bosques, rí­os de agua cristalina... vientos impetuosos... parajes extraños y alucinantes, en los cuáles se vivieron pasajes oscuros de sesiones espiritistas que dieron vida a estos versos. Puedo deciros que aunque sirvieron de inspiración para lo que a continuación leeréis... puedo aseguraros que es una experiencia que no desearía regalar a nadie...

Espero los disfrutéis y comentéis...



Celestina

La mazmorra os espera
sin escuchar condena,
es que habéis secundado
a aquel burbo bribón,
que osó quebrantar
el sagrado lugar,
¿Por qué lo habéis ayudado?
Tu boca se niega
a pronunciar tu sentencia,
ya que sabéis vuestra culpabilidad,
¡Ya que sabéis haber profanada
la Santa Necrópolis!
Vuestra osadí­a os lleva a la muerte,
pues seréis acusada de jorquina
y no de Celestina.




Plegaria

Oh Dios! ayúdame a persistir,
no me desamparéis
os ruego que me liberéis
de las ligaduras que atan mis manos,
¡No soporto más este dolor!
¡No soporto más este calvario!
Ayúdame a salir de la oscuridad
dime como andar en la luz.

Alma inocente, blancura transparente,
intercede al Padre por mi,
ruega por el alma
de este pobre ángel Caí­do
y no me olvidéis. Adiós.



Mentes

La sangre corre frí­a
por las venas de aquellos seres,
hace mil años que sus cuerpos
fueron corrompidos por el tiempo;
sólo sobreviven sus espí­ritus
que vagan sin rumbo
por ese limbo eterno.
Buscan un alma piadosa
que los pueda ayudar
y sacar de las oscuras tinieblas
a la inmensidad de la luz;
puedo escuchar sus lamentos
que me persiguen
como un cruel castigo,
¡No los puedo hacer callar!

De repente despierto en otro sueño
y no puedo asegurar,
si lo que oí­ fue el viento
o la inconciencia de los seres.



Terciopelo

Mis ojos mojan las sábanas de los dioses,
mientras mi cuerpo se quema
al caer en la cenizas
del fuego recién consumido.

Mis manos están de un color púrpura
que pocas veces se ve en los mortales
Mi mente cae en un sueño
que pronto se vuelve gris,
porque ya no soy dueña de mi ser.

Muy a lo lejos escucho una ahogada voz
que pronuncia mi nombre
¡Cómo hacerla callar! Me hace daño.
Me gustaría despertar
y sentir que todo sólo es una fantasí­a
de mi impetuosa mente.

La lluvia ya cesó
y desde mi ventana se ve
el sol que parece sonreir.

LAS NUBES NEGRAS YA SE HAN IDO



Muerte

Muy cerca de escucha:
"Siento frí­o, ellos se acercan,
¡No quiero, me lastiman!"
Es la voz de la doncella
que no puede despertar,
pues maléficos son sus sueños.
El viento trae nuevas voces,
todos quieren escuchar
el canto de los ángeles;
pero sólo ella puede sentirlos.

El poderoso veneno
está invadiendo su espí­ritu;
pecho negro como la muerte
no te lleves a quien sólo a ti
puede rescatar,
El dice: "Debo ser cruel,
para ser bueno."
Desaparece entre los árboles negros,
nunca nadie más vió a la doncella
y sólo queda un Adiós en el aire...




Tiempo

Cuando los brillos de la noche se apagan
florece en mi un nuevo ser,
que cambia la oscuridad de mi vida
que fusiona todo aquello que toca.

Es un ángel, un ángel que regresó
de su larga batalla contra el Tiempo,
que ganó gracias a sus artes celestiales,
ha engañado al tiempo
ha sobrevivido a su paso;
Lo veo y siento
parado a los pies de mi lecho
y en mis oí­dos sus suaves susurros posa:
"¿Has entendido querida doncella
que al Tiempo sólo lo puedes vencer
con vuestro propio tiempo?"

Libera mi cordón de plata,
y vuelve a desaparecer
entre las cortinas de la habitación...


MCMIXV

I
Seguiré golpeando las puertas prohibidas
convocando espí­ritus ausentes,
Hasta escuchar la voz de la serpiente,
navengando por los rí­os de la Fe
y obtener un camino hacia la Eternidad.
Todo se convertirá en tristeza
por iniciarme en los Principios de Lujuria
Todo será por mi culpa
Yo soy... ¿y tú?


II
Con una soga atada al cuello
caminaré por aquella víaa
sin separarme de la luz
ascendiendo a la oscuridad;
despreciando todo
lo que pueda corroer mi objetivo,
desencadenando el dolor y el sufrimiento.
Cuando llegue a la hora final y pempestuosa,
desapareciendo en las tinieblas blancas
guiado por la Luz Maligna.



++++++++++++++++++++++++++

Aunque el gran bosque del orgullo
siga incrustado en mi ser
seguiré llorando en tus ojos.

Recuerdo caminos y estaciones,
pensamientos alejados de la realidad,
que nos llevaron hacia la locura
hacia el frí­o de la noche,
con el resplandor de la Luna.

Fue el principio y fin
de nuestra inocencia,
Nos iniciamos en las artes oscuras
desafiamos la Ley de los Mortales,
y nos sumergimos
en un río de Enigmas por siempre.

Diomina Mayán

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